El ajedrecista Maximiliano Pizarro destacó el trabajo de sus entrenadores, Nadia Montenegro y Leonardo Duarte, además agradeció a la ilustre Municipalidad de Calama y al alcalde, Eliecer Chamorro, por la ayuda desplegada en este certamen continental.
Hace una semana atrás se dio inicio a un torneo panamericano de ajedrez, el cual contó con la participación de 20 exponentes loínos de esta disciplina, dentro de los cuales destacó Maximiliano Pizarro, quien alcanzó el séptimo lugar continental gracias a su gran rendimiento.
Al respecto, el loíno categoría sub 16 valoró la posición alcanzada en este evento híbrido, y agradeció el apoyo que ha tenido para conseguir este importante logro de carácter internacional.
“Me pareció un torneo muy fuerte, y estoy agradecido de haber tenido el privilegio de jugarlo. La verdad, no pensé que llegaría tan lejos, quiero agradecer a la municipalidad de Calama, a mi profesora Nadia por sus gestiones, al profesor Leo Duarte que me ayudó bastante igual y muchas gracias a todos en general”, expresó Maximiliano Pizarro.
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Por su parte la entrenadora de Cormudep Calama y presidenta del Club Reyes del Loa, Nadia Montenegro, recalcó que “este torneo fue uno de los más difíciles que han jugado los chicos y se demostró el nivel panamericano. Estaban jugadores muy destacados de nivel mundial, de hecho, en la categoría de maxi estaba el maestro internacional de 16 años, Diego Flores (de Perú), a quien conocimos en el internacional de Arica, el primer campeonato fuerte que fuimos con los muchachos del Club Reyes del Loa, y allá Flores en algún minuto la entabló al gran jugador Alexei Shirov”.
“Este panamericano fue un torneo muy difícil, muy extenso, pero ayudó sin duda a los chicos a querer salir, a querer competir en otros países representando a Chile y en demostrar que Calama tiene un buen nivel, y vamos por más. Ha sido un torneo muy llamativo, precioso y esperamos poder seguir representando a Calama en otra instancia”, puntualizó Nadia Montenegro quien de esta forma nuevamente deja en alto el nombre de Calama gracias al rendimiento de sus pupilos.
