El proyecto está enfocado para que los estudiantes tengan sus primeros pasos con la educación ambiental.
Con el propósito de fomentar la conciencia ambiental desde edades tempranas y promover el conocimiento acerca del entorno natural, la flora y fauna de nuestra comunidad, las educadoras de párvulos, junto con las familias y la comunidad en general, iniciaron este proyecto a principios de año. Con dedicación y perseverancia, lograron recolectar más de 100 tapas y materiales reciclados para crear este espacio significativo destinado a los niños del establecimiento.
En ese sentido, la asesora medioambiental de Comdes, Dalila Peña Muñoz, mencionó la importancia de que estos espacios se logren para que los niños se acerquen a la educación ambiental y enfatizó que “acá vemos un gran trabajo de los apoderados de los niños, del cuidado y ahí es donde nosotros destacamos la importancia que tiene para los párvulos porque estamos enseñando a cuidar de otro ser vivo, no es tan solo una planta que hay que darle agua, sino que tenemos que entregar esa conciencia de que ellos son seres vivos y que ellos necesitan también de nosotros”.
Es relevante resaltar que las actividades programadas con los niños del establecimiento incluyen la responsabilidad de cuidar la vegetación de la huerta, así como el manejo adecuado de las semillas durante el proceso de siembra y conocer la fauna que hay en la comuna.
La encargada del sello educativo medio ambiente del establecimiento, Sandra Valdivia, dijo que “nosotros queremos resaltar nuestro sello educativo, es por eso que se realizó esta huerta para que los niños puedan descubrir a través del entorno, acá tenemos más de 100 tapitas recicladas gracias a las familias, realizamos el rincón del chingolito para que nuestros niños puedan conocer sobre la fauna y la flora dándole sentido a este proyecto”.
