Dos vinos producidos en el Desierto de Atacama por la Cooperativa Lickanantay, de Toconao, fueron galardonados con medallas de oro en el concurso Mundial de Vinos Extremos 2021 celebrado anualmente en el Valle de Aosta, Italia.
Los vinos premiados fueron Ayllu Moscatel Dulce 2020 y Ayllu Naranja 2020 (también de uva moscatel), ambos producidos por la Cooperativa Lickanantay de Toconao, integrada por 40 pequeños productores agrícolas atacameños de la zona de Toconao y San Pedro de Atacama.
El Mundial de Vinos Extremos del Valle de Aosta es un concurso que se realiza anualmente y reúne vinos que proceden de viñedos de zonas de montaña, en terrazas y en lugares o pequeñas islas en pendientes. Este evento está reservado a los vinos producidos en regiones de montaña o procedentes de cultivos heroicos, y busca promover y valorizar la producción enológica de esas tierras que se caracterizan por dificultades estructurales, pero también por vinos singulares que tienen una personalidad extraordinaria.
Su objetivo es enfatizar las características únicas de esos productos así como dar a conocer a los consumidores los aspectos culturales de la viticultura de montaña y el valioso trabajo que los viticultores hacen para la salvaguardia del territorio y del medio ambiente. El Mundial de Vinos Extremos es organizado por Cervim (Centro de Investigación, Estudios, Protección, Coordinación y Valorización de la Viticultura de Montaña), en colaboración con la asesoría de Agricultura de la Región Autónoma del Valle de Aosta, los Productores del Valle de Aosta y la Asociación de Sommeliers italiana – Valle de Aosta, bajo el patrocinio de la OIV (Organización Internacional de la Viña y el Vino).
Sin duda que los vinos Ayllu son vinos extremos, producidos por la Cooperativa LickanAntay formada por pequeños productores agrícolas de Toconao, Socaire, Celeste y San Pedro de Atacama, cuyos viñedos crecen de manera sorprendente en los oasis a 2.500 metros de altitud que existen en algunas quebradas que se “esconden” en medio de la inmensidad y desolación del territorio más árido del mundo, el Desierto de Atacama.
Estos agricultores son todos de la etnia Lickan-Antay o Atacameños, pueblo originario que habita la zona desde hace 12 mil años siempre desplazándose entre el Salar de Atacama y la Cordillera de Los Andes, dedicándose a la caza y la recolección, y hacia el año 500 a.c. conformarían la Cultura San Pedro, que se asentó en el oasis Toconao incorporando a su sistema de vida el cultivo de hortalizas y frutas en pequeños huertos en oasis regados por las aguas que bajan desde las alturas de Los Andes hacia el desierto.
Estos reconocimientos llegan en un excelente momento para la Cooperativa Lickanantay, ya que desde algunos años están empeñados en mejorar la calidad y producción de sus vinos, y este año ya dieron inicio a un plan de desarrollo, diversificación del portafolio y sustentabilidad hacia el 2026, para lo cual han accedido a diversos fondos de apoyo de instituciones como Indap y Corfo, señaló a todovinos.cl Wilfredo Cruz, gerente general de Lickanantay y encargado de llevar a cabo nuevos proyectos y el crecimiento de la cooperativa.
Wilfredo Cruz, técnico en vitivinicultura, se desempeñaba hace poco como el encargado de la producción de vinos de la cooperativa junto a la asesoría de un enólogo profesional. Ahora, nos cuenta, han contratado al enólogo Sergio Jara para comandar el crecimiento de la producción y velar por la calidad de estos vinos producidos en medio del Desierto de Atacama, cuyas características de suelos y clima les da un sello más que especial.
Cruz sostuvo que con este plan en curso al año 2026 buscarán consolidar la calidad y características únicas de los vinos Ayllu, con la meta de alcanzar 80 mil botellas en 2026, frente a las 12 mil botellas que producen actualmente.
Además, agrega, buscarán consolidar la sustentabilidad de sus proyectos a largo plazo, buscando incorporar a las nuevas generaciones a la producción de vinos, pues una parte importante de sus 40 socios tienen más de 60 años. En ese sentido, Cruz explicó que otro aspecto del proyecto 2026 busca garantizar a futuro que los cooperados de más edad puedan contar con una renta que les asegure una buena calidad de vida, con el objetivo de que reciban tres salarios mínimos por mes.
También tienen en agenda la apertura de una tienda de vinos en San Pedro de Atacama, en función de su gran afluencia de turistas; establecer acuerdos para que los vinos Ayllu se vendan en tiendas especializadas a lo largo de Chile, y seguir las conversaciones ya iniciadas con la entidad gubernamental ProChile para exportar a Estados Unidos y Reino Unido, y más adelante para China y Brasil.