Proveer cuidado y rehabilitación a ejemplares silvestres heridos, abandonados o perdidos, con prioridad para especies protegidas y con problemas de conservación, es uno de los objetivos principales de la misión del Centro de Rescate y rehabilitación de la Fauna Silvestre de la Universidad de Antofagasta, esto junto a la premisa de informar y educar respecto al tema, ha sido una importante cruzada que los profesionales de la iniciativa han desarrollado desde 1981.
Tortuga Verde.
Desde esta perspectiva, no es difícil imaginar la cantidad de ejemplares de diversas especies que han pasado por las dependencias del centro en los último 36 años, siendo una tortuga verde del tipo Chelonia Mydas uno de los últimos huéspedes recibidos.
Así lo comento el médico veterinario y administrador del centro de rescate de la UA, Andrés Valenzuela, comentando que el ejemplar marino fue enviado a nuestra ciudad desde el Centro de rescate de la Universidad San Sebastián en la Octava Región, donde fue encontrada perdida en aguas frías.
El envío del ejemplar fue realizado, vía Latam con el apoyo de Sernapesca, para ser examinado y liberado en una zona mar adentro donde corrientes cálidas la puedan llevar hacia el norte del litoral donde existe un hábitat más apropiado para su especie.
Tras el proceso señalado y después asegurarse que la tortuga se encontraba en óptimas condiciones de salud, el profesional del centro de rescate junto al director del Centro Regional de Estudios y Educación Ambiental (CREA) de la Universidad de Antofagasta, voluntarios y un representante de Sernapesca, llevaron al ejemplar en una embarcación a altar mar para poder liberarla.
Liberación.
Transportada con los resguardos necesarios y con los implementos indicados, el equipo se hizo a la mar, con dirección a Punta Tetas, al oeste de la ciudad de Antofagasta, esperando encontrar las corrientes necesarias que alejen al ejemplar de la costa, para evitar su regreso a la playa y ser atacada por lobos marinos que frecuentan la zona.
Una vez ubicado el sector adecuado, los profesionales procedieron a poner una identificación al ejemplar y a liberarlo, con la esperanza de que pueda volver a su hábitat natural.
